Contemplarnos pausadamente en la dignidad de Jesús de Na¬zaret, es ir a la fuente inalcanzable de donde beber nuestra inque¬brantable dignidad personal, por maltratada que pueda estar o podamos sentirla. Fuente de seguridad, autoestima y vocación

L’habitatge s’ha convertit en un problema de primera magnitud al nostre país. És el problema...




